Comer en Europa

Un"orgasmo gastronómico" en Atenas

Una de las preocupaciones más grandes de las personas cuando se van a mochilear a Europa es la comida; qué comer, adónde comer, cuanto cuesta la comida...
Bueno efectivamente comer en Europa es caro, sobre todo en comparación con los países de América y también es cierto que algunos países son más caros que otros pero también es cierto que hay algunas cosas que se pueden hacer para ahorrarse algo de dinero en la comida.
Ciudades como París, Londres y Florencia y todo Suiza son bastante caros y quizá haya que prepararse para pagar más mientras que en países de Europa del Este o algunas ciudades de España o Alemania se puede ahorrar un poco más.
Para empezar es bueno saber que muchos o casi todos los hostales en Europa incluyen en su tarifa el desayuno, que si bien es cierto no es nada lujoso ni muy variado es un gran ahorro y se puede empezar el día con algo en el estómago.
Otro consejo es buscar pequeños restaurantes locales y comer de pie ya que los precios varían si uno come de pie o en una mesa y también varía si la mesa es adentro o afuera del restaurante, es más caro si es afuera.
En las zonas turísticas obviamente todo va a ser más caro, pero en las ciudades también viven personas y no viven en las zonas turísticas, por eso es buena idea buscar una zona residencial donde se van a encontrar supermercados con precios relativamente buenos donde se pueden comprar atunes, pan, ensaladas y distintos productos comestibles que nos pueden ahorrar mucho dinero.
Lo importante cuando se viaja de mochilero a Europa no es qué se coma, es comer y saber apreciar la comida de cada país, de cada región y de cada ciudad y entender el porqué las personas comen lo que comen por eso la forma más fácil de hacerlo es comer como lo hacen las personas de ese lugar y los restaurantes pequeños y poco pretenciosos son la mejor forma de hacerlo.